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Amar al prójimo como a uno mismo: ¿qué deberíamos amar primero?

Hace unas semanas Jesús Adrián, un músico y pastor mexicano, publicaba en twitter:

Es una frase bonita que suena coherente pero… analicemos bien lo que está diciendo. Para el que no lee la Palabra desde luego la frase le suena estupenda; tiene sentido a ojos humanos, parece ser correlativo con los mandatos de Dios y no es difícil de digerir ya que se ajusta muy bien a la mentalidad y cultura actual.


"Ámate a ti primero y luego podrás y sabrás amar a otros."

"Yo primero y luego el resto."

"Yo, yo, yo y luego, si eso, tú."


El pastor Jesús Adrián asegura en el tweet que todo se resume en amarse a uno mismo, amar al prójimo y amar a Dios, ¡en ese orden! además, resalta.

Este es un claro ejemplo de cómo las personas pueden verse arrastradas sin darse cuenta por corrientes (de muchos tipos: filosóficas, espirituales, humanistas..) que se cuelan en las iglesias, si no contrastan lo que ven y escuchan.

En este caso, no parece ser demasiado grave lo que está proclamando pero, esto sucede también con otros temas teológicos de mucha más relevancia por eso he querido utilizar este ejemplo; porque si en lo pequeño eres engañado.. ¿qué será de ti en lo grande?


«Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo.» —1 Juan 4:1

SANA DOCTRINA: VIGILA QUÉ ESTÁS RECIBIENDO Y DE DÓNDE.


Es cierto, los pastores tienen la responsabilidad como líderes de leer, investigar, estudiar y dirigir a la iglesia PERO también es responsabilidad de cada uno revisarlo y comprobarlo, no sólo para ser consciente de si lo que estás recibiendo es correcto o no, sino también para meditar sobre ello y poder realmente aplicarlo a tu vida.


«Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; así prosperarás y tendrás éxito.»
— Josué‬ ‭1:8‬ ‭

La lectura bíblica es esencial para la vida espiritual del creyente; para crecimiento, para entendimiento, para trabajar en tu intimidad con Dios… De otra manera, no experimentarás convicción, cambio ni transformación.

Si el único momento en que recibes de Dios y te alimentas espiritualmente es a través de otros —ya sea con creadores de contenido o a través de tu pastor los domingos en la iglesia—, estás en problemas amigo. Cualquiera podrá venderte lo que quiera y tú, ingenuamente y de buena fe, lo creerás.


PERO recuerda; no todo el que habla con Biblia en mano te dice lo que pone en ella.


Hay que saber distinguir entre lo bueno y lo aparentemente bueno, y no podrás hacerlo a menos que te instruyas y alimentes tu espíritu de manera diaria.


«Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra.»
— 2 Timoteo 3:16-17

Además, la salvación es individual y la relación con Dios es personal; nadie puede hacerlo por ti. No puedes hacerte llamar seguidor de Jesús y en vez de seguirlo, dejar que otros lo sigan por ti. O ¿cómo podrás creer en lo que no conoces?, ¿cómo podrás vivir conforme a lo que no conoces?.

CUIDADO‼️⚠️


 


 



«Porque vendrán tiempos en que no se soportará la sana doctrina, sino que, llevados de sus propios deseos, se rodearán de maestros a la medida de sus propios antojos, y se apartarán de la verdad y se volverán a las fábulas. Pero tú permanece siempre alerta, proclama el mensaje de salvación, desempeña con esmero el ministerio»
—2 Timoteo 4:3-5

Sé sobrio y prudente, sé cauteloso y observador.


¿QUÉ DICE LA BIBLIA?


Ya hemos visto el tweet de Jesús Adrián. Ahora, comparémoslo con las Escrituras.

Veamos cuál es el orden que declara la Biblia y por qué, Mateo 22: 37-39 dice lo siguiente:



ENCUENTRA LAS 7 DIFERENCIAS😂😂

———————————————————

Tweet del pastor: 1. Amarse a uno mismo, amar a los demás, amar a Dios.

• Jesús: 1. Amar a Dios, 2. amar a los demás.


Veamos qué es lo que significa la palabra “amor“ en el hebreo bíblico:


¿Y corazón?: "Amarás a Dios con todo tu corazón..."



¿Y cuál es el concepto bíblico del alma?: "con toda tu alma..."



Aaayyy, vaya pastor, ¡casi!

Muy linda su teología y frase de twitter pero creo que va más allá…😅



AMAR A DIOS


¿Por qué se hace tanto hincapié en esto? Amarse a uno mismo puede ser engañoso y conducir al egocentrismo y la exaltación de uno mismo, lleva rápido al "miro por lo que es mío y lo tuyo no me importa", se vuelve individualista. Sin embargo, centrar tu atención en Dios te cambia interiormente y amarlo te lleva a amar a los demás sin importar qué.


«Ustedes han oído que se dijo: “Ama a tu prójimo y odia a tu enemigo”. Pero yo les digo: Amen a sus enemigos y oren por quienes los persiguen, para que sean hijos de su Padre que está en el cielo. Él hace que salga el sol sobre malos y buenos, y que llueva sobre justos e injustos.»
— Mateo 5:43-45

«Sed más bien amables unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, así como también Dios os perdonó en Cristo.»
— Efesios 4:32

Dios es el significado de amor, el creador del mismo, de Él proviene; de Él hemos aprendido lo que es. Por tanto, permanecer en Él nos convierte en ese amor desinteresado humilde y compasivo. No tiene sentido buscarlo en nosotros mismos cuando nuestras emociones y sentimientos son fluctuantes; hoy aquí arriba, mañana aquí abajo; hoy pienso esto, mañana lo otro. Él en cambio, es inmutable; siempre igual, dice algo y lo mantiene.


«Que el Señor los lleve a amar como Dios ama, y a perseverar como Cristo perseveró.»
2 Tesalonicenses‬ ‭3:5‬ ‭

¿Significa todo esto entonces que no debemos amarnos?

No, por supuesto que no. Eso es un razonamiento muy infantil.


Significa que es lógico y natural quererse a uno mismo, es nuestra posición predeterminada y está bien. Es importante quererse y sentirse bien con uno mismo pero es necesario mantener un equilibrio para no llegar al egoísmo.


Una vez alguien dijo: humildad no es pensar menos en uno mismo, sino pensar más en los demás; esto es igual. No se trata de no darnos nuestro lugar, se trata de no darnos uno más alto del que nos toca.


Hay una forma bíblica y saludable de amarse a uno mismo que se basa en este balance ⤵️

Filipenses 2:4 dice: «Cada uno debe velar no solo por sus propios intereses, sino también por los intereses de los demás.»


En este versículo vemos ese equilibrio en el que ni nos descuidamos ni descuidamos a otros.


¿Por qué es eso importante?

No tiene nada de malo amarse a uno mismo, es algo que na que todos hacemos. Amarnos a nosotros mismos no es necesario de recordar, no centrar demasiado nuestra atención en nosotros mismos en cambio, sí es necesario de recordar y advertir. NO hay falta de amor propio en nuestro mundo sino que más bien, hay un exceso de éste.

El mandamiento "amarás a tu prójimo como a ti mismo", esencialmente nos está diciendo que tratemos a otras personas, así como nos tratamos a nosotros mismos. Hoy en día predomina el pensamiento "vale pero, ¿y yo qué gano a cambio?".


Jesús en la parábola del buen samaritano, relata una historia en la que tan sólo una persona demostró amar y preocuparse por alguien por encima de sí mismo, dando de su tiempo y recursos sin anteponerse ni pensar en sí mismo y sus beneficios y/o intereses. En Lucas 10:30-37 hubo otras dos personas más, un sacerdote y un levita; con posición respetable y reputación ante los hombres, pero que pasaron de largo.


Jesús aquí también introduce indirectamente cómo no debemos fiarnos ni guiarnos por las apariencias porque la gente aparenta más que es; ellos a diferencia del samaritano, se negaron a ayudar al hombre necesitado, fracasaron en demostrar ese amor del que tanto presumen.


Contexto de la Parábola narrada por Jesús:


El contexto se establece en Lucas 10:25-29, donde los maestros de la ley judíos están desafiando a Jesús y uno de ellos le hace una pregunta, con la esperanza de encontrar una pregunta que Jesús no pueda responder para demostrar que él es poco compatible con los expertos religiosos de Judea. En lugar de darles una respuesta directa, Jesús responde con de la siguiente manera:

Parábola del buen samaritano ⤵️


El hombre herido era judío al igual que sacerdote y el levita. Sin embargo, quien le ayudó fue un samaritano.


¿Por qué es esto un detalle importante?

Los samaritanos eran (y son, porque siguen existiendo en la actualidad) un grupo étnico y religioso que sigue una antigua forma de judaísmo. Durante el tiempo de Jesús, había una amarga rivalidad entre los judíos y los samaritanos. Los judíos consideraban a los samaritanos como herejes y los samaritanos rechazaron la legitimidad del sacerdocio judío en Jerusalén y una parte significativa de las escrituras judías, tenían su propia copia de la Torá hebrea. Lo último que un rabino judío respetable hubiera hecho en ese momento, es utilizar a un samaritano como buen ejemplo en una parábola sobre la moral, tal como hubiera sido poco probable que un maestro samaritano hubiese usado a un judío como un buen ejemplo. Aquí podemos ver lo que Jesús estaba tratando de hacer con esto. Al utilizar a un samaritano, Jesús está diciendo que el mandamiento de amar a los demás no se reduce a un grupo selecto con el que nos sentimos cómodos, estamos de acuerdo, etc.

El sacerdote y el levita se dirigían al templo a hacer sus ritos religiosos diarios, "no tenían tiempo" y si se manchaban de sangre, en base a la ley mosaica serían impuros. Jesús aquí resalta la importancia de la ley moral por encima de la ceremonial.


Jesús presentó esta historia como una ilustración de lo que significa amar al prójimo como a uno mismo; sin excepciones ni límites.

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