Acerca de
Hola, me llamo Lourdes, tengo 21 años. Siempre he creído en Dios, y he tenido una fe muy fuerte y firme, a pesar de no haber crecido en un ambiente practicante. Hace dos años, pasé por una serie de circunstancias que me hicieron acercarme más a Él y sentí que Dios me llamaba a más. Fue un tiempo en el que profundicé mucho en mi fe.
Así que, después de meses investigando y leyendo mucho, llegué a una conclusión y tomé una decisión. Me decidí a seguirle de verdad. Mi visión de Dios y mi manera de entender el mundo cambió por completo. Dios ha revolucionado mi vida desde entonces, y es algo por lo que estoy eternamente agradecida. Toda mi vida había creído en Él, pero nunca había llegado a conocerlo y experimentarlo como hasta ahora. Estos dos últimos años se ha vuelto evidente e imprescindible en mi vida, y ahora vivo lo que creo.
Sentía que no podía guardarme todo eso que estaba descubriendo para mí sola, porque estaba teniendo un gran impacto en mi vida y sabía que también podía tenerlo en la del resto. Pero el detonante final de todo, fue el fallecimiento de mi abuela el 5 de octubre de 2021.
Nunca antes había experimentado un dolor y un vacío semejante, me hizo reflexionar mucho... Marcó un antes y un después en mi vida en muchos aspectos, y me hizo plantearme muchas cosas. Al principio podía calmarme de alguna forma y encontrar formas y vías de gestionar todas esas emociones y pensamientos, pero llegó un punto en el que todo ello me superó: batallé con ansiedad por muchos meses, no podía dormir, sentía un dolor que no puedo poner en palabras. Me sentía rota, me encerré en mí misma por mucho tiempo. La echo de menos cada día de mi vida, pero Dios estuvo conmigo en todo el proceso y me dio paz y calma en medio de todos esos pensamientos y sentimientos. Fue una temporada en la que Dios me enseñó muchas cosas, sobre todo fe y confianza.
Nada ni nadie más fue capaz de llenarme ni sanar mis heridas interiores. Él calmó mis miedos. Dios es más real de lo que la gente es capaz de imaginar y mi deseo más grande ahora, es que puedan llegar a conocerlo de verdad. Todo lo que hago, es con la esperanza de darle la esperanza a alguien.
Todo este proceso del duelo, me hizo darme cuenta de la fugacidad de la vida, y con el tiempo, también esto mismo me hizo tomar conciencia de la urgencia y necesidad de la predicación del Evangelio. Nunca sabemos cuándo es nuestro último momento. Mi carga por las almas fue aumentando y finalmente, todo ello me impulsó a crear este pequeño proyecto pero con gran propósito. Actualmente creo también contenido en TikTok donde cuento con 15K seguidores y poco a poco va creciendo en número para la Gloria de Dios y con su ayuda. Está abriendo muchas puertas, permitiéndome servirle y brindándome las oportunidades para hacerlo.
Misión
He creado este espacio de fomento de la fe, el diálogo y la racionalidad en el que podrás encontrar herramientas, recursos y contenido de valor gratuito con la finalidad de ayudarte a resolver tus dudas y darle respuesta a tus preguntas sobre todo lo relativo a Dios, su existencia y lo que ello implica para nosotros.
"Más bien, honren en su corazón a Cristo como Señor. Estén siempre preparados para responder a todo el que les pida razón de la esperanza que hay en ustedes. Pero háganlo con gentileza y respeto, manteniendo la conciencia limpia (...)"
- 1 Pedro 3:15-16
Visión
Mi pasión es compartir y predicar el mensaje de Jesús porque ha transformado radicalmente mi vida y sé que puede revolucionar y cambiar por completo también la de otros. Sueño con poder crear mi propio ministerio que combine el Evangelismo, el Discipulado y la Plantación de Iglesias con Acción Social y Ayuda Humanitaria. Tengo muchas aspiraciones e ideas de proyectos que me gustaría llevar a cabo más adelante, desde comedores sociales hasta cooperación internacional.
Me gustaría mucho también, poder impulsar proyectos de Apologética, en especial a nivel de España y Europa, donde veo una clara necesidad y decadencia espiritual.
Objetivos
Ayudar y equipar tanto a creyentes como a no creyentes; creando contenido edificante y de valor y poniendo a su alcance recursos (visuales, materiales, etc) útiles.
Derribar barreras, prejuicios y estereotipos; invitando a las personas a razonar, investigar por si mismas, cuestionarse y tomar una posición basada en una conclusión real (independientemente de cuál sea) y no en el rechazo personal o emocional a la idea de Dios, desconocimiento, ignorancia, experiencias con la iglesia, haber crecido en un hogar con unas determinadas creencias, limitaciones geográficas o barreras culturales e ideológicas.